16 de octubre de 2012
La Jornada
Mientras los científicos del Comité para la Investigación e Información Independiente sobre Ingeniería Genética (Criigen, por sus siglas en francés) alertan al mundo sobre los tumores, daños hepatorrenales, envejecimiento prematuro, trastornos en el sistema reproductivo y más anomalías, registrados en ratas alimentadas con maíz transgénico (Silvia Ribeiro, La Jornada, 6/10/12), Monsanto se apresura a cobrar el compromiso pactado con el presidente Felipe Calderón, de liberar la siembra de maíz transgénico en México, antes de que termine su sexenio.