Agrocombustibles

Más allá de la segunda generación de agrocombustibles

19 de enero de 2008

Frente a los obvios problemas de la llamada primera generación de agrocombustibles (a partir de cultivos como caña de azúcar, maíz, soya y palma aceitera), por ejemplo su nula o negativa eficiencia energética, la industria y gobiernos, apoyados en algunos investigadores académicos, hablan de una “segunda generación” que superaría este problema, y también, supuestamente, la competencia con los cultivos alimentarios.

Lo que sigue

05 de enero de 2008

Pese a que son ampliamente criticados desde muchos puntos de vista, los combustibles agroindustriales siguen en alza. No es extraño, ya que según estimaciones del Financial Times, sólo en los países de la OCDE reciben hasta 15 mil millones de dólares de subsidios anuales (FT, 30/10/2007).
Subsidios públicos que van a engordar el lucro privado, a los que se suman los múltiples subsidios indirectos que reciben algunos cultivos destinados a ese fin, como el maíz en Estados Unidos.

Corporaciones, agrocombustibles y transgénicos

15 de septiembre de 2007

La ola de los agrocombustibles sigue avanzando, no porque sea buena para el ambiente ni aporte solución alguna al cambio climático global –de hecho lo va a empeorar– sino porque las industrias más poderosas del planeta lo ven como una fuente de jugosas ganancias y encima consiguen que muchos gobiernos las apoyen con leyes y subsidios.

La locura de los agrocombustibles

21 de julio de 2007

Cada vez más queda más claro que los agrocombustibles no solamente no son una panacea ambiental para enfrentar el cambio climático, sino por el contrario, lo van a empeorar. Al mismo tiempo van sentando las bases para nuevas crisis alimentarias y de escasez de agua, junto a la expulsión de campesinos e indígenas de sus tierras, todo ello con amplias repercusiones económicas, sociales y ambientales negativas, principalmente para las poblaciones del tercer mundo.

Agrocombustibles y estructura agrícola

09 de junio 2007
La Jornada

La estructura agrícola en el mundo está cambiando velozmente a raíz de la fiebre por los agrocombustibles. Estados Unidos es uno de los principales actores en el mercado agrícola internacional, por el volumen de sus importaciones y exportaciones. El presidente George W. Bush, muy poco preocupado por el calentamiento global del planeta, pero mucho por la seguridad energética de Estados Unidos, estableció como meta para reducir su dependencia de las importaciones de petróleo sustituir 5 por ciento del consumo de gasolina, con 7 mil 500 millones de galones de etanol para el año 2012.